( Manet. Olimpia )
Primero
En tiempos de crisis, queridos hombres blancos de ojos claros, gastar sin piedad no es de mal tono. ¡Que ardan las pérdidas en los balances de las sociedades que tenéis domiciliadas en paraísos fiscales! Dejad que falsas bancarrotas, productos de la ingeniería financiera, se acerquen a vuestros cotos de caza en Andalucía, Extremadura o La Mancha, no vaya a ser que las declaraciones a la Hacienda Pública os salgan positivas. ¡Qué ordinariez!
Segundo
Es de mal gusto vender obras de arte para pagar facturas del sastre o del carnicero. La Olimpia de Manet consuela muy mucho cuando se contempla desde la taza del excusado, máxime si ella está forrada con pan de oro.
Tercero
En los foros internacionales, sostengan ustedes, impasible el ademán, que la situación universal nada tiene que ver con la exhuberancia irracional y la codicia de quienes manejan los globalizados mercados bursátiles, financieros e inmobiliarios.
Si algún despistado pregunta por la génesis de las hipotecas basura en USA, limítense a contestar engolando la voz:
-Esto, bueno, ahí hay de todo. Los productos estructurados han ayudado a engrasar los canales de distribución del crédito.
Cuarto
En las cenas de caridad, a mil dólares cubierto, para ayudar a la cría en cautividad del esturión persa, repitan que confían, a ojos cerrados, en que los buenos tiempos de la especulación fácil y del corruptor ladrillo pronto volverán, “cuando ganen los nuestros”.
Quinto
Sean solidarios. Ayuden a la recuperación económica y sustento diario de los pobres. No se trata de dar trabajo, no. Abandónense a su natural hedonismo. De cuando en cuando, una buena juerga con sexo y “velinas” berlusconianas, champagne y caviar a go-gó, se apaña con unas decenas de miles de eurejos y…¡siempre caerán migajas para el pueblo!
Sexto
Matriculen a sus cachorros en la universidad privada más cara del mundo mundial. Antes, asegúrense de que, en ella, los profesores de ética de los mercados tienen claro que el capitalismo es bueno, justo, equitativo y necesario. Y, ¡por el amor de Dios!, sobre todo, sobre todo: ¡de que enseñen bien clarito que nadie debe controlar a las libres fuerzas del mercado!
Siempre existirán manos invisibles que se forren a costa de la plebe. ¡Faltaría más!
(fotos del autor)
Afilada pluma!
ResponderEliminarHiere y saja lo que se pudre.
Abrazos, amigo Manuel!
Lo has clavado.
ResponderEliminarBesos
Manuel en estos seis consejos para los pobres ricos , tu pluma he escrito verdades como templos.
ResponderEliminarMis felicationes por tu escritura.
En un país en crisis que cada vez el pueblo llano paga más los errores de los gobernantes y de los pudientes ricos , el pobre cada vez más pobre.
Ahora, años de vacas flacas.
Un abrazo de MA para ti.
Don Francisco de Quevedo y Villegas te invitaría a un café para charlar y poetizar larga y distendidamente de este Caballero, Don Dinero, al cual has descrito (se me antoja así) con un agudo y afilado estilo quevedesco del siglo XXI.
ResponderEliminarMuy bueno, querido Guillermo.
Besos anticrisis.
Tus letras describen de una manera increible esa crisis que nos aqueja y consume cada día.
ResponderEliminarUn abrazo.
Atrevida crítica la tuya y digna de elogio. Todas las reformas acaban beneficiando a las rentas altas, hay cosas que son una infamia como un Decreto que permita a los residentes de esos paraísos comprar deuda pública española sin retención fiscal y sin que se sepa cual es la identidad del comprador, de qué país es o qué rentabilidad han tenido.
ResponderEliminarClaramente vimos que cuando falló el mercado inmobiliario se buscó el mercado del petróleo, por eso subió tanto.
Sólo se piensa en ganar dinero, especular y el pobre que se muera.
Qué vergüenza de humanidad.
Un abrazo Manuel.
Fantastique...mon ami !!!
ResponderEliminar...y en plena campaña electoral !!!!!
Encontré columnista sin periódico...
Un abrazo
Jajaja, mi querido niño Manuel, has hecho una faena de dos orejas y rabo, siempre teniendo en cuentas que en los cosos abunda el oro y grana...
ResponderEliminarUn beso entré "Oléeeesss!"
Susi DelaTorre
ResponderEliminarMaría en la huerta
MA
Marisa
Yessi
Loli Salvador
Maite
María en rojo
El mordisco del tiempo me obliga a daros las gracias en junto. El cariño es individual pues no soy persona de concurrencia. Besos
Yo creo, Manuel, que deberías mandar esta comunicación al Club Bildeberg.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
Muy bien, Manuel, yo creo que estos consejos los deberías enviar al Club Bildeberg.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó
En la oscura noche bloggerina, perdiéronse textos, comentarios, humor y paciencia. Hoy, si el tiempo y la autoridad de Palo Alto no lo impiden, procedo a los agradecimientos que os debo, que se hacen solos porque me salen del "almario". Abrazos y besos vuelan hacia Susi, María, MA, Marisa, Yessi y Loli, ; a Francesc le abrazo, que no le beso, pues no soy francés ni ruso. ¡Hale, a ser felices y comer perdices!
ResponderEliminarbravo.
ResponderEliminarmanuel, ¡bravo!
un abrazo, sicero
Qué consejos más certeros, Manuel.
ResponderEliminarUn saludo.
Kynikos y Piel, Piel y Kynikos, reconozco, agradezco y correspondo vuestras amables visitas. ¡Paz y bien!
ResponderEliminarSe puede decir más alto pero no más claro.
ResponderEliminarHas dado en la diana con una pluma magistral!
Un fuerte abrazo.
Este post, escrito de tu puño y letra con mucho arte, debe ser leído con tu permiso mi querido amigo Manuel,lo comparto en mi muro. de Facebook...Pasa los años y la vida sigue igual...En permanente crisis para los pobres y en abundancia para los ricos.
ResponderEliminarBesos y un año más compartiendo letras.